Las inteligencias artificiales y el mundo de los videojuegos van decididamente de la mano: no en vano, uno de los símbolos más extendidos y merecidamente populares del medio son los extraterrestres de Space Invaders. A lo largo de su historia, la amenaza o alianza extraterrestre ha fundamentado la mecánica, el ritmo y la estética de géneros completos, como los expresivamente llamados «matamarcianos». En los últimos años, la colisión con inteligencias de otros mundos ha dado pie a franquicias completas, desde Halo a Gears of War, cada cual con sus cadacualadas. Una de las más exitosas y celebradas, Mass Effect, estrena en breve su tercera entrega, lo que junto al lanzamiento del DLC de Saints Row Gangstas in Space, con abundantes guiños a todo lo marciano, son la excusa perfecta para recordar a unos cuantos extraterrestres que no han recibido toda la atención que merecen, en nuestra muy parcial pero indefectiblemente honesta opinión.
Mes: febrero 2012
Los fundamentos del juego portátil: PS Vita vs. The World
La historia detrás de esta historia
El pasado 17 de enero, quien junta estas letras acudió a una presentación de PS Vita muy bien acompañado por los aguerridos mondopixeleros John Tones y Javi Sánchez. Este último contó magníficamente las impresiones que aquella mañana le dejó la máquina aquí, aquí, y aquí. En mi caso particular, era mi primer contacto con la nueva consola portátil de Sony y, aunque me dirigí a la cita con la Vita rebosante de optimismo, abandoné el lugar donde tuvo lugar la presentación con las manos calientes y el corazón frío, con la sensación de haber tocado una máquina potentísima pero vivificmortificada por un software helador. Este artículo ante el que ahora se encuentran, en el cual se intentará relacionar todo cuanto debería ser el juego portátil con lo percibido en mi primer contacto con PS Vita, ya rondaba por mi cabeza en las primeras horas del día en que tuvo lugar la mencionada presentación, pero fue imposible llevarlo a término porque me sentía demasiado pesimista, en exceso paralizado como para escribir nada debido a las negativas sensaciones que me había transmitido (el software de) la máquina. Hoy, tras haber pasado casi una semana con mi propia PS Vita, he recuperado aquella idea y por fin he podido vomitar aquel artículo que en mi alma de jugador se había quedado atragantado.
Continuar leyendo «Los fundamentos del juego portátil: PS Vita vs. The World»
«Kingdoms of Amalur: Reckoning» – Crítica
Kingdoms of Amalur: Reckoning
Big Huge Games – Electronic Arts
PS3, Xbox 360, PC (versiones comentadas: PC, 360)
En Phonogram: The Singles Club, uno de los personajes tiene una idea para montar el grupo musical definitivo para el siglo XXI: los primeros discos de pop están a punto de perder el copyright, es el momento de coger lo mejor de cada uno y crear algo a partir de sus segmentos, de forma subversiva, con letras explícitas y cantante sexy (claro que su intención es perder la virginidad tróspida que le rodea como un halo). Kingdoms of Amalur: Reckoning, la apuesta de una ex estrella de baseball con talentos de trayectoria a su alrededor, pretendía algo parecido. Hibridar. Convertir su juego en un melting pot del rollo clásico, la hostia contemporánea, y el contenido descomunal de los Skyrim del mundo. Llegar a lo nuevo partiendo de la violación de lo viejo, algo tan consustancial al videojuego como la pantalla y el mando.
Continuar leyendo ««Kingdoms of Amalur: Reckoning» – Crítica»
«Malicious» – Crítica
Malicious
Alvion
PlayStation 3
Sin duda alguna, si tuviera que confeccionar una lista con mis videojuegos favoritos, Final Fight estaría muy arriba en el ranking. Es uno de esos juegos que jamás me podrán aburrir, y créanme si les digo que lo revisito unas cuantas veces todos los años y me enamora cada vez que regreso a él. Este cariño infinito que le profeso a la recreativa de Capcom se debe a que creo que es el beat’em-up (o brawler, como prefieran) más perfecto que existe, un género que me chifla en sus múltiples variantes, transformaciones e hibridaciones y que me lleva a intentar ponerle las manos encima a aquellos títulos actuales que me prometen poder experimentar sensaciones similares a la de asestarle rápidos golpes en el mentón a navajeros, punkis y holgazanes de Metro City.
Concursazo de «Catherine»: regalamos videojuegos, bandas sonoras y libritos de arte
Qué gran invento el de los títulos autoexplicativos: te dejan total libertad para hacer un texto introductorio que consista en explicar el gran invento que son los títulos autoexplicativos: te dejan total libertad para hacer un texto introductorio que consista en explicar el gran invento que son los títulos autoexplicativos: te dejan total libertad para hacer un texto introductorio que consista en explicar el gran invento que son los títulos autoexplicativos: te dejan total libertad para hacer un texto introductorio que consista en explicar el gran invento que son los títulos autoexplicativos: te dejan total libertad para hacer un texto introductorio que consista en explicar el gran invento que son los títulos autoexplicativos: te dejan total libertad para hacer un texto introductorio que consista en explicar el gran invento que son los títulos autoexplicativos.
«Catherine» – Crítica
Catherine
Atlus
PS3, Xbox 360
Críticos del mundo que le habéis sacado bola negra a Catherine (los dos que seréis), reconoced al menos que desde el anuncio del juego hasta su lanzamiento, pasando por las primeras capturas y su tortuosa búsqueda de distribuidor occidental, la gente de Atlus ha sabido jugar tan bien al despiste con público y medios que incluso ahora que lleva una semana en la calle nadie que no se haya sentado delante de él por lo menos una hora larga tendrá muy claro qué demonios esperar. ¿Aventura gráfica pseudoerótica? ¿implacable juego de puzzles? ¿confesionario interactivo? Catherine toca todos estos palos en un momento u otro, pero aspira a ser entendido como algo más que la suma de sus partes. Y si te parece que al jugarlo uno se retrata como ser humano, prueba a escribir sobre él. Verás qué risa.
«Puzzlejuice» – Crítica
Puzzlejuice
Asher Vollmer, Greg Wohlwend, Jimmy Hinson
iOS
Es habitual leer en encendidos comentarios a lo largo y ancho de la Red el tópico de que los críticos de videojuegos escriben mucho y juegan poco. Que se han pasado al lado oscuro y prestan la misma atención al quién hace qué, quién lo publica y qué se ha dicho que a las mecánicas y las impresiones que aporta un videojuego, cuando no se dedican directamente a levantar sus antorchas en defensa de una pose. Esta es una opinión discutible a todos los niveles, ya que hay filias de todos los sabores y periodistas de todos los colores. Pero servidor debe confesar que con este Puzzlejuice ha estado a puntito de cometer semejante delito.
«The Darkness II» – Crítica
Hace unos días, una jovencita sin el más mínimo conocimiento (ni ganas de tenerlo) sobre la industria, la cultura o las circunstancias de los videojuegos, observaba en mi casa la copia de The Darkness II con la que he estado jugando las últimas semanas. «¿Y dices que está bien? Pues es curioso: viendo la portada, nadie lo diría. Parece la típica explotación gótica, con estas letras chungas y esta posturita atormentada…» Claro, ella no tenía por qué saber dónde residen las virtudes de The Darkness II (parte de la prensa especializada tampoco lo sabe, por otra parte, y nadie se echa las manos a la cabeza), pero es curioso que apuntara con tanta precisión al núcleo de los problemas no ya de The Darkness II, sino de toda la corriente de juegos de ultimísima generación en los que la historia es un elemento tan importante como la mecánica.
«Resident Evil: Revelations» – Crítica
Resident Evil: Revelations
Capcom
Nintendo 3DS
A raíz del breve apunte que sobre el concepto de la adicción en los videojuegos dejé caer en la crítica de Zack Zero que publicamos hace unos días, mi cabeza inició un proceso de reflexión y empezó a regurgitar pensamientos, como por ejemplo, el siguiente: como consecuencia del enganche que un videojuego provoca en un jugador, este jugador no puede parar de jugar a ese videojuego, de lo cual cabría inferirse que al mencionado jugador le está gustando el videojuego al cual está jugando. Pero, ¿qué provoca que un jugador no pueda dejar de jugar a un videojuego que no le está gustando? Porque justamente eso es lo que a mí me ha sucedido con Resident Evil: Revelations. Continuar leyendo ««Resident Evil: Revelations» – Crítica»
Un mes jugando a «Star Wars: the Old Republic»
Star Wars: The Old Republic
BioWare
PC
La capacidad de diferenciar entre desarrolladora y distribuidora es una línea arbitraria tan buena como cualquier otra para distinguir entre quien simplemente es un jugador y quien además se toma un interés por el medio. El Star Wars: The Old Republic ejemplifica por que es de justicia tener en cuenta esta distinción.
Que BioWare, responsable de algunos de los mejores RPG que se recuerdan, se pusiese a desarrollar un online masivo tendría que haber causado más expectación. Que lo hiciese sobre el paleo-universo de Star Wars que tan bien supo plasmar en sus ya clásicos Knights of the Old Republic solo añade más motivos para un hype que nunca llegó. El Star Wars Galaxies supuso una decepción quizás excesiva (el tiempo dirá si algún otro juego sabe incorporar los muchos aciertos inéditos de aquel adorable fracaso), pero quizás moderar la expectación no es malo. Blizzard fomenta tal expectación en sus eternos desarrollos que el Diablo III tendrá que curar el cáncer para no defraudar.
Continuar leyendo «Un mes jugando a «Star Wars: the Old Republic»»